Como Germinar Semillas De Marihuana En Agua

En nuestro post de hoy te enseñaremos como germinar semillas de marihuana en agua. Aunque quizá no sea la técnica de germinado más recomendable ni la más empleada, es una opción más a tener en cuenta. Una semilla para germinar necesita una temperatura media y mucha humedad. Estas suelen ser las condiciones que se suelen dar en primavera, cuando podremos observar que en plena naturaleza las semillas de muchas especies vegetales que han pasado todo el invierno en estado latente, comienzan a germinar.

Y si una semilla para germinar necesita una humedad muy elevada, sumergidas en agua es del 100%. Esta técnica es muy empleada especialmente para la germinación de semillas viejas. Generalmente con el paso del tiempo, el poder germinativo de la semilla decae. Y cualquiera puede comprobar que una semilla vieja germinará más fácilmente con esta técnica que con cualquier otra.

Como germinar semillas de marihuana en agua

Como germinar semillas de marihuana en agua es muy sencillo. Pero se deben tener en cuenta algunos aspectos que os contaremos a continuación. Por ejemplo, es recomendable usar agua destilada o de mineralización débil. Además es interesante usar un poco de agua oxigenada, lo que favorece la estimulación de la semilla en el proceso de germinación. Y como no, será necesario un ambiente oscuro y templado. La luz daña las semillas y el frío puede llegar a matarlas.

Germinar semillas de marihuana en agua paso a paso

Además de agua destilada y agua oxigenada (asegúrate de ser agua oxigenada pura; algunas incluyen ácido cítrico, lo que reduciría mucho el pH del agua), necesitarás un vaso o recipiente. Preferiblemente usaremos alguno con tapa, para que no entren ni suciedad ni insectos.

Lo primero que haremos es llevar el vaso con el agua destilada (o embotellada de mineralización débil). A continuación añadiremos en agua oxigenada. La proporción es de 2-3 ml de agua oxigenada por litro de agua. Así que si usas por ejemplo 200ml de agua, tendrías que usar de 0,4 a 0,6 ml de agua oxigenada.

Es importante no sobrepasar la cantidad de agua oxigenada. Las semillas no germinarán más rápido. Al contrario, pueden dañarse. Usa una jeringa pequeña para añadir una cantidad entre 2-3ml por litro de agua.

A continuación, introducimos las semillas en esta mezcla. Si alguna flora, es que está vacía o dañada y no germinará. Es mejor retirarla y sustituirla por otra, en lugar de dejarla en el vaso.

Y por último, situamos en vaso tapado en un lugar templado y oscuro. La temperatura debe rondar los 23-24ºC, aunque el margen puede ser más amplio, entre los 20ºC y los 28ºC. Y por supuesto, que sea un lugar seguro, no querremos sin querer darle un golpe y derramar todo el contenido del vaso, semillas incluidas.

¿Cuánto tardan en germinar las semillas de marihuana en agua?

Como germinar semillas de marihuana en agua no es más lento que otras técnicas de germinación. En Aproximadamente unos 2-4 días, las semillas comenzarán a abrirse y su raíz a crecer. Este tiempo puede variar ligeramente dependiendo de la edad de las semillas e incluso de la variedad. Puede que algunas en 24 horas ya hayan abierto. Y puede que otras necesiten algún día más.

Otra opción es simplemente dejar las semillas a remojo 24 horas. Después, se continúa el germinado o bien en servilletas de papel absorbente, en algodón, o directamente se pasan al sustrato. En especial con semillas que cuentan con cierta edad, como decíamos al principio, es muy interesante.

¿Y una vez germinan las semillas?

Ya hemos visto como germinar semillas de marihuana en agua. ¿Pero que hacer una vez hayan germinado las semillas?. Lógicamente, se deben pasar a un sustrato. Siempre insistiremos en la necesidad de usar un sustrato de calidad. Un mal sustrato puede contener desde materia orgánica en descomposición o incluso sin descomponer, hasta plagas, hongos y otros patógenos que encontrarán en una semilla recién germinada una pequeña fuente de alimento.

¿Cuál sería un buen sustrato?

Un buen sustrato no es aquel que contenga muchos nutrientes. Es más, una planta recién nacida prefiere un sustrato con pocos nutrientes que con muchos. Un buen sustrato debe ser ante todo esponjoso, textura que proporciona principalmente la perlita y la fibra de coco. Esto garantizará un buen drenaje y evitará encharcamientos al regar. Además facilitará el trabajo a las raíces a la hora de colonizarlo.

¿Qué macetas usar?

Preferiblemente se usarán macetas pequeñas durante la dos primeras semanas, por ejemplo de 1 litro. Son cómodas de manejar, más fáciles de controlar los riegos y lo suficientemente grandes para que las raíces se sientan cómodas durante 1-2 semanas. Después trasplantaremos a una maceta de mayor tamaño y al gusto de cultivador. Puede ser una de 3-7 litros para volver a trasplantar pasadas unas 3-5 semanas. O directamente en su maceta definitiva o en un buen hoyo en el suelo.

¿Cómo plantar las semillas germinadas?

Una vez veamos que las semillas cuentan con raíz, se deben pasar al sustrato. Cuanto más larga sea la raíz, más posibilidades habrá de que se dañe al manipularla. Lo idea es que no lleguen a superar nunca un centímetro de longitud. Pero esto no es posible muchas veces, puede que durante la noche la raíz crezca en exceso. O que por cualquier otro motivo no podamos plantarlas antes.

Antes de nada, prepararemos las macetas. Pondremos una base de material drenante en el fondo de la maceta, por ejemplo arlita (bolas de arcilla expandida). Después rellenamos con el sustrato. Y ayudándonos de un lápiz o bolígrafo, hacemos un pequeño agujero. Introducimos la semilla con la raíz hacia abajo y cubrimos para terminar con una fina capa de sustrato. La semilla no debería estar enterrada más de 1,5-2 cm.

Como germinar semillas de marihuana en agua: conclusión

Toda técnica de germinado es buena cuando se consigue que las semillas germinen. Unos prefieren hacerlo en servilletas de papel absorbente. Otros prefieren germinarlas en agua. Otros prefieren hacerlo de la manera más natural, es decir, enterrándolas en el sustrato y que dispongan desde el primer momento de espacio para el desarrollo de las raíces. Como siempre, lo mejor es probar los diferentes métodos, sacar conclusiones propias, y quedarse con el que más cómodo resulte.